sábado, 21 de febrero de 2015

Agua, pobreza y depresión

Hace 21 meses que nos mudamos a nuestro nuevo hogar, hemos oscilado entre emociones de alegría satisfacción y hartazgo. Nuestra casa es muy grande para sólo nosotros dos, con paso lento hemos avanzado en los acabados y constantemente me hago un "cocowash"
"No desesperes, algún día terminaran"
De cuando llegamos a ahora, hay muchos avances, sin embargo estos avances se ven opacados por un mal mayor, la falta de agua potable.

Cómo si no fuera suficientemente caótico para mí, vivir rodeada de polvo, el no tener agua ha quebrado totalmente mi voluntad de levantarme cada día y hacer mi rutina diaria.
Por las mañanas, despierto, tiro de la cadena del inodoro para darme cuenta de que otra vez "no hay agua" y tener la sensación que transmite aquella canción de Jose Alfredo Jimenez:
"La vida no vale nada, no vale nada la vida, comienza siempre llorando y así llorando se acaba"

¡Esperen un momento! no se rían ni me tachen de exagerada,pero después de pasar mas de año y medio en una casa que no tiene todas aquellas comodidades con las que estás acostumbrado, que te absorbe tus bolsillos porque siempre hay algo nuevo por hacer, que al limpiar te hace vivir en una nube de polvo y que para colmo, no puedes darte ni un baño decente, termina quebrantando mi espíritu y el de cualquiera.

Acarrear agua para bañarse, lavar platos, cocinar, lavar las manos - no hablemos de lavar ropa porque esa es una tarea imposible-,  se convierte en una "rayita" mas para las frustrantes labores domésticas, ya cargo con el "todo yo" y ahora debo cargar con la cubeta. Esa odiosa cubeta que duplica el tiempo de los quehaceres, que causa molestia a mi espalda, rodillas y hombros, lastimados por permanecer tantas horas trabajando en una silla y escritorio poco ergonómicos.

Y no me salgan con "se agradecida, al menos tienes agua", porque ya quisiera verlos a ustedes como superarían esta situación. "Pon un Tinaco", "Pon una Cisterna", "Compra otro escritorio", "Compra otra silla", "¡Tan fácil! te ahogas en un vaso con agua".  Es fácil cuando no te persigue el estúpido pretexto de "No tengo dinero". Apenas percibo los honorarios de mi trabajo y ya debo repartirlo en las cuentas atrasadas, sumen  mi estúpido orgullo que no me deja aceptar ayuda ¡Todo debo hacerlo yo, con mis méritos!, con el polvo de mi frente, perdón ¡sudor!.
He llegado a un punto donde estoy bien hundida en la mierda, literalmente, porque mi casa está tan sucia, que las pelusas ruedan como chamizos por todas las habitaciones.Ahora si que ¡Me lleva la chingada!, en la mierda, con dolencias, con un chingo de trabajo y sin agua, pero con un orgullo hasta el cielo que de nada me sirve.

Entonces viene la trillada reflexión "hay otros peores que yo". Es verdad hay otros peores y ahora los comprendo, año y medio sin comodidades,  me ha llevado casi al borde de una depresión, ¿Que será de aquellos que así nacen? sin comodidades, sin servicios, sin trabajo, sin educación y con viviendas peor que la mía. Yo tengo quien me ayude, sólo necesite callar mi orgullo y aceptar la ayuda de quien me tiende la mano.

Aquello de "El pobre, es pobre porque no hace nada" puede tener algo de cierto, pero ¿Que le motivará a querer hacer algo? ¿Quien le brindará la ayuda para salir de su pobreza?  Si yo, que me encuentro en una posición privilegiada necesito ayuda para dar solución a mis necesidades y en ocasiones me resulta difícil encontrar la motivación para "hacer algo" ¿Qué les queda a aquellos que están "peor que yo"?

En fin, creo que mi concubino, se asustó al verme en modo "la vida no vale nada", pues se ha puesto a limpiar y con eso me dio una motivación para sacudirme un poco de mierda. ¡Hasta la próxima!



jueves, 19 de febrero de 2015

Porque TU tienes más tiempo...

Porque tu tienes más tiempo....es lo que me ha dicho el asesor financiero esta mañana.
Obviamente se refería a que yo tengo más tiempo que el señor con el que comparto vida desde hace ya casi 18 años, vida y hace menos años, trabajo.
¿Y qué sabe él si tengo más tiempo? ¿Qué le hace pensar que yo tengo más tiempo?
Será ,claro,mi supereficiencia, ésa que a pesar de todo lo que tengo que hacer, hace, que él me escriba un email cargado de peticiones en cuanto a papeleos, pagos, gestiones etc... y yo supereficiente no tarde mas de un día en darle respuesta a todo cuanto solicita. Ésa que me hace tener aún la cabeza tan correctamente amueblada para que de memoria pueda darle datos y aclarar situaciones.
O será esa capacidad de atender cuando me habla  (a pesar de que como buen andaluz me cuesta , a veces, horrores entender los que dice) y poner atención a todas y cada una de sus palabra sin que ninguna caiga en saco roto o en el olvido, y claro, el se siente atendido, reconfortado.
O será que mi inteligencia salta a la vista y él se da cuenta de que puede explicarme una vez las cosas y yo la pillo, enseguida.
O será que como buena y estúpida mujer que soy , aguanto lo que me echen y no voy quejándome, con la cara apretada como si  me estuviera cagando o presumiendo mi agenda llena de compromisos, diciendo : "pfff, tengo que hacer ésto, aquello y lo otro"
O será que se priorizar, organizar y  decir que NO a ciertas cosas o compromisos triviales para no perder el tiempo en tarugadas.
Lo que sea, será, pero de lo que estoy segura es de que no tiene ni puta idea de los esfuerzos que tengo que hacer para cumplir con todas mis obligaciones de la forma tan eficaz como lo hago.

No tiene ni puta idea de que antes de venir a trabajar ya he trabajado y cuando salga de esta cueva, seguiré currando.
No tiene ni puta idea de que me levanto muy temprano, de que me acuesto rendida...
Pero claro...soy mujer, soy ama de casa...me sobra el tiempo para jugar a la "oficinita".
Cada vez que resuena su frase en mi cabeza "porque tu tienes más tiempo"... me hierve la sangre...

sábado, 14 de febrero de 2015

Desahogo de sábado por la mañana

Les comparto lo que viví esta mañana.

No se porque, pero adoro al inútil rintintin, es mi forma cordial de insultar o "pendejear" a alguien, lo malo que algunos son tan pendejos que no lo captan o son tan inteligentes para ignorarlo. Por unos segundos me llena de placer contestar con "rintintin", para después darme cuenta que es como una especie de cobro por adelantado, chantaje o relación abusona: te maltrato, pero te doy lo que quieres.

Mi cliente "favorito" me despertó esta mañana, lo peor es que no me despierta con un clamor de ayuda, si no con un reclamo:

"Karenina, la versión del software no me muestra X información en pantalla que necesito para hacer X cosa"

Mi cliente abusado, abusado por abusar de Él y abusado por "vivaracho", ya no me llama por teléfono, ahora me escribe, nuestra relación sigue siendo la misma, le trato mal, pero siempre le doy lo que quiere. Recibe su dosis de "rintintines" escritos y voalá aparece la solución a sus problemas.
De cualquier forma es mejor que nuestro dialogo sea escrito, ya que cuando el habla, emite pensamientos y peticiones a velocidad de palabra por minuto y eso, como ustedes comprenderán es exasperante.

Bueno, regresando al tema que me despertó esta mañana, leer ese mensaje me lleno de furia desde las entrañas. Quizá no había ningún reclamo en el mensaje, pero yo lo interpreto como un reclamo, como si yo no hubiera hecho algo bien, ¿Como puede atreverse a cuestionar que YO no hice algo bien?, ¿Cómo? si cada segundo de mi vida va plagado de una dosis de cuestionamiento para hacer siempre lo correcto. Estas cosas desatan mi furia, quiero decirle que es un estúpido, un inútil, quiero retorcerlo en mis manos hasta desaparecer por su osado reclamo, no quiero guardar silencio, ni puedo evitar responder el mensaje de la siguiente forma

"Hace meses te mande la versión especialmente hecha para tu petición"

Permanecí unos minutos en la cama, a través del teléfono husmee en mi correo electrónico cuando lo había enviado, para "rintintinear" que YO tenía razón. No es muy sencillo buscar en una pequeña pantalla, así que no pude quedarme en cama, me levanté, encendí mi computadora y lo encontré; se lo re-envíe y me quedé reflexionando en esta situación, ¿Hubiera sido diferente si el me dijera "Karenina, no encontré la ultima versión del Software, puedes enviármela"? 
Es probable que no, de todas formas me hubiese molestado que Él no fuese ordenado con sus cosas y dependiera de mí para solucionar sus problemas.  

Es una especie de poder maldito, me molesta que me pidan algo, pero al mismo tiempo me siento superior de poder resolverle la vida a los demás, pero ¿quien es el "abusado" en esta relación?  el se lleva su parte, pero también se lleva algo de mí, es un pequeño circulo vicioso de mi vida y mis relaciones con los humanos, porque aunque estoy describiendo un asunto laboral, es igual con mi vida de pareja, con mi familia; hago mi berrinche, pataleo, "rintintineo" y les doy lo que quieren.

Mi vida me ha enseñado que hay que luchar y batallar por las cosas que haces, por eso no estoy dispuesta a que los demás lo obtengan de la forma bonita, deben sufrir para apreciar, mi subconsciente así me hace actuar, pero ¿Cual sería el comportamiento correcto? si es que hay una forma correcta, ¿sonreír y ser amable y dar lo que quieren? al final de todas formas lo voy a dar, ¿es justo hacer pasar a los demás por este momento incomodo? ¿Soy una persona Horrible, por querer que los demás hagan las cosas como yo? ¿Y si los demás no necesitaran de mí, sería más feliz o me deprimiría de que nadie me necesite? ¿Cómo saberlo?, pues siempre habrá "abusados"dispuestos a acudir a ti por su dosis de maltrato para ahorrarse la "fatiga" y facilitar así su existencia.

miércoles, 11 de febrero de 2015

Vituperio

Hoy tengo ganas de que me linchen,  pues voy a ser radical y anticuada.
Pues si, porque llevo mucho tiempo pensando que las mujeres deberíamos ser mas listas.
Creo que nos hemos perdido en el camino a la liberación femenina...nos hemos convertido en remedo de la clase masculina. Queremos ser mejores o iguales que ellos, pero mejores o iguales que ellos en lo que ellos hacen.
Esta muy bien que la mujer estudie, aprenda, investigue se prepare etcétera, etcétera , pero que pasará que cuando lleguen los hijos, si es que llegan, porque si no llegan , este post  puede ser omitido, pues bien, cuando lleguen los retoños...nada volverá a ser igual, o nada debería ser igual.

La semana pasada leía en en periódico que una mujer que se dedica a la política a niveles de la alta esfera, después de dar a luz a su bebé, orgullosa se reincorporaba  a sus labores en tan solo diez días.
¿Se puede estar orgullosa de ello? ¿Orgullosa de dejar a tu bebé sin ti? ¿Orgullosa de no estar a su lado para calmar su hambre o callar sus llantos? ¿Orgullosa de que otros brazos le acunen y le den calor?
Algunas madres no tienen mas remedio pues son el único sustento económico. Me callo y les admiro.

Pero, y las que lo hacen por decisión propia? ¿Por qué lo deciden asi?

Porque son libres para elegir.
Por no perder un estatus, social, laboral, económico.
Porque no digan " No trabaja"
Porque no digan "  Es ama de casa"
Porque no piensen que no tiene carácter o aspiraciones.
Porque no piensen que está chapada a la antigua, hay que ser moderna!
Porque hay que tener mas dinero, para poder gastar más.
Porque salir a trabajar es realizarse como persona.
Porque hoy en día está peor visto criar a tus hijos que salir a trabajar fuera del hogar.
Porque ellas también tienen derecho.
¿Por qué?

La maternidad, milagro de milagros, queda vilipendiado en pro de la modernidad, liberación y progreso de la mujer? De verdad se puede cumplir con todo a la vez?
Tenemos hijos, que dejamos al cuidado de otras mujeres que a su vez tienen hijos que dejan al cuidado de otras mujeres...

En el en el reino animal "no pensante" pocas hembras gozan de que el macho esté a su lado para alimentar y cuidar a las crías. Ya que vivimos en una sociedad que basa su estructura en un núcleo familiar formado por padre, madre e hijos ¡¡aprovechemos!!, si los hijos nacen en pareja, que es lo ideal, dejemos que sean ellos los que se encarguen de salir a cazar y traer el sustento a casa y nosotras gocemos y suframos las mieles y las hieles de la crianza.

Quizá nuestra libertad radique en la elección de ser madres o no, si elegís ser madres, sed madres con todo vuestro ser... sin olvidar que tenemos la capacidad, si hace falta, de sacar adelante a nuestra prole, contra viento y marea, solas.
Ya podéis lincharme.